domingo, 23 de septiembre de 2012

Una carta pequeña, para alguien grande

Estaba en mi habitación cuando en eso pensé en ti y tuve la necesidad de escribirte una carta. No de esas que se teclean en el Notebook, ni en un móvil, ...no. Una carta a mano. Ya casi no venden cosas para escribir una carta. Quiero que tengas mis sentimientos contigo. Y que los leas, cada vez que creas que me pierdes. Porque puede ser que desaparezca, pero nunca me voy. Siempre estás, sin importar lo que pase. ¡Eres tú! ¿Como no quererte? Palabras guardadas en un sobre. Conservadas solo para tí.

¿Porqué?

Porque creíste en el amor verdadero, hasta que le viste con alguien más.
Porque supiste guardar un secreto y al final fuiste el único que lo hizo.
Porque estabas seguro, hasta que comenzaste a dudar.
Porque creíste en el para siempre, hasta que te mostraron un quizás.
Porque llegaste a recordar el rostro, pero  no logras recordar el sonido de su voz.
Porque supiste lo que es esperar, pero nunca te dió a conocer lo que significa volver.
Porque alguna vez fuiste niño y creíste en lo más increíble.
"Pero creciste y te diste cuenta que no era posible", pues no.
Pasó el tiempo y la gente te convierte en lo que eres ahora. Alguien desconfiado, simplemente por temor. Alguien que quiere de a poquito, por las posibilidades.

                  Alguien que quiere volver a creer.