lunes, 9 de julio de 2012

Yo no quería un chico guapo, no quería un príncipe, ni siquiera pedía que fuera el mejor en algo. Yo solo quería una historia de amor, no hacía falta que fuera de película, solo necesitaba que alguien me quisiera.
Pero ni eso. No hay nada. Cuando le miro ya se que no siente ni siquiera una décima de lo que llegó a sentir. Sé que nada volverá a ser como antes. Porque todo se ha ido.
Sus abrazos desaparecieron, sus sonrisas se borraron y su luz se apagó. Nunca pensé que él pudiera cambiar tanto, pero me suelo equivocar.
Ya no existirán esas mañanas tan mágicas. Sus risas sin sentido al mirarme. Ese guiño tan especial que me hacía sentir viva. Las palabras se han borrado y de su boca ya no oiré un "te amo, lo eres todo"
Ahora comprendo que mentía, que no valía para nada estar embobada con él como una idiota, porque todo se acaba.